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O Dicastério para a Doutrina da Fé determinou que as aparições em Dozulé, Normandia, "não são de origem sobrenatural".

13 Novembro 2025
Texto em Espanhol:

(ZENIT Noticias / Roma, 13.11.2025).- Más de medio siglo después de que una mujer francesa afirmara haber visto a Cristo y haber recibido una petición divina para construir una monumental «Cruz Gloriosa», la Santa Sede ha emitido su veredicto final. El Dicasterio para la Doctrina de la Fe (DDF) ha determinado que las supuestas apariciones en Dozulé, Normandía, «no son de origen sobrenatural», cerrando así uno de los capítulos más persistentes y controvertidos del misticismo católico moderno. La decisión, aprobada por el Papa León XIV el 3 de noviembre y comunicada al obispo Jacques Habert de Bayeux-Lisieux el 12 de noviembre de 2025, representa la culminación de un largo proceso de discernimiento que comenzó hace décadas. Si bien los eventos en cuestión inspiraron una ferviente devoción entre algunos grupos, el dictamen del Vaticano deja claro que el fenómeno carece de autenticidad divina y ha generado confusión doctrinal y pastoral que ahora exige una solución.
La historia de Dozulé se remonta a 1972, cuando Madeleine Aumont, una ama de casa local, afirmó que Jesús se le apareció, pidiéndole la construcción de una inmensa cruz iluminada —de 738 metros de altura— y un “Santuario de la Reconciliación”. Los supuestos mensajes también predecían el inminente regreso de Cristo y prometían la salvación a todos los que se arrepintieran al pie de la cruz proyectada. La declaración de la DDF reconoce que estos relatos despertaron un genuino interés espiritual, pero advierte que también introdujeron graves distorsiones teológicas. La principal es el intento de equiparar la propuesta “Cruz Gloriosa” con la Cruz del Calvario, el signo único e irrepetible del sacrificio redentor de Cristo. El documento subraya que el misterio de la Cruz no puede replicarse ni reproducirse mediante ninguna estructura física: su poder salvífico ya impregna cada Eucaristía, cada iglesia y cada creyente unido a la pasión de Cristo. El cardenal Víctor Manuel Fernández (Tucho), prefecto de la DDF, explicó que la cruz no es un amuleto material ni un objeto sagrado dotado de poder propio. «Ninguna cruz, ninguna reliquia, ninguna revelación privada puede sustituir los medios de gracia establecidos por Cristo», escribió. «Confundir el signo con el misterio supone el riesgo de convertir la fe en una forma de sacralidad material ajena al corazón del Evangelio». Resultaban especialmente preocupantes para las autoridades eclesiásticas las afirmaciones atribuidas a Aumont que vinculaban la contemplación física de la cruz de Dozulé con el perdón de los pecados. La DDF calificó tales afirmaciones de «incompatibles con la doctrina católica sobre la gracia, la salvación y los sacramentos». La Iglesia enseña que la absolución procede de Cristo a través del sacramento de la reconciliación, no del contacto o la proximidad a un objeto físico.
El documento vaticano también aborda otro tema recurrente en los mensajes de Aumont: la predicción del inminente regreso de Cristo. Si bien afirma la certeza de la Segunda Venida como verdad de fe, la DDF advierte contra las interpretaciones milenaristas o cronológicas que pretenden identificar su momento o señales externas. Advierte que tales especulaciones corren el riesgo de reducir la esperanza cristiana a una expectativa apocalíptica de acontecimientos extraordinarios, en lugar de un camino cotidiano de fe y conversión. La carta, que el obispo Habert ahora está autorizado a publicar como decreto diocesano, reitera juicios anteriores de sus predecesores, en particular del obispo Jean Badré, quien ya había declarado que los fenómenos de Dozulé no eran sobrenaturales décadas atrás. Con esta nueva y definitiva declaración, el Vaticano busca poner fin a la confusión que durante mucho tiempo ha rodeado el lugar. La postura de la DDF no niega la sinceridad de la devoción que se desarrolló en Dozulé, ni desalienta la veneración de la Santa Cruz, que sigue siendo central en la fe cristiana. Más bien, reafirma el verdadero significado de la Cruz: como signo sacramental que conduce a los creyentes a la gracia, no como fuente de gracia en sí misma. «La Cruz no necesita 738 metros de acero ni de hormigón para ser reconocida», señala con énfasis un pasaje del comunicado.
En una reflexión pastoral que acompaña al decreto, el obispo Habert expresó su intención de guiar a los fieles hacia una auténtica devoción arraigada en la doctrina de la Iglesia. «Mi única preocupación», escribió, «es acompañar a los creyentes en su fidelidad a la fe católica tal como ha sido recibida y vivida en el seno de la Iglesia». Con la publicación de este decreto final, la larga y a menudo polémica saga de Dozulé llega a su fin. Para el Vaticano, el juicio no es simplemente un acto disciplinario, sino un recordatorio: la fe no depende de grandes construcciones ni de revelaciones privadas, sino del silencioso y perdurable misterio de la Cruz, ya presente en el corazón de todo creyente.


Visto em: https://es.zenit.org/2025/11/13/vaticano-pone-fin-a-decadas-de-especulacion-supuestas-apariciones-de-jesus-en-dozule-son-declaradas-no-de-origen-sobrenatural/
 

 

PELA MINHA CRUZ, NÓS VENCEREMOS

15 de Janeiro de 2006

JESUS:

Se a Minha Santa Cruz Gloriosa pedida em Dozulé é tão alta, é porque ela é o antídoto do veneno injetado por Satanás no Mundo inteiro. Para que ela possa deter o Mal, deve ser erguida o mais depressa possível com esta altura de 738 metros. Erguida com Força e Amor, para fazer barreira ao maior Desastre que vos ameaça, depois de tudo quanto já sofrestes. O Meu Sagrado Coração está aberto para vos ajudar. Será pela Minha Cruz erguida em Dozulé que Nós venceremos.

Fazei e Eu farei.

Eu estarei junto de vós.

A Minha Cruz é a Luz do Meu Sofrimento. Ela é a Minha Santa Glória. Amen + .

 

A MINHA CRUZ, MEDIANEIRA DO PERDÃO DE DEUS

21 de Janeiro de 2006

JESUS:

A Reconciliação atribuída à Minha Cruz Gloriosa é um Pacto por toda a Eternidade, uma convenção solene entre Deus e as Nações do Mundo que vierem arrepender-se à Minha Cruz Gloriosa. É uma Vida nova para aquele que se reconhecer pecador diante da Minha Cruz. Este Ato é o próprio Deus que o autentifica pelo Seu Perdão e o inscreve ou grava no Céu para sempre. Na Minha Cruz, o Povo de Deus encontrará a sua Salvação. Eu Mesmo apagarei o pecado do Mundo que convidou Satanás a tomar o Meu lugar neste Tempo do Fim.

No Gólgota, a Minha Cruz devolveu-vos a Vida Eterna, que vós próprios tínheis perdido por causa do Pecado do primeiro homem, Adão.

Em Dozulé, a Minha Cruz Gloriosa prepara-vos para, no Dia do Senhor, vos encontrardes dignos diante d’Ele. Com efeito, há uma perspectiva terrível, a do Juízo e de uma indignação ou furor de fogo: atenção àquele que tiver calcado aos pés o Filho de Deus, considerando como profano o Sangue da Aliança pelo qual ele mesmo foi santificado e tiver ultrajado o Espírito da Graça (Hb 10, 26-30). Com efeito se, no Gólgota, pela Cruz do Sacrifício, vós recebestes a Graça

de voltar a ver Deus na Sua Casa, o certo é que logo a seguir o pecado vos perseguiu e vós acabastes por tê-lo aceitado. E o pecado esconde-vos da Minha Vista.

É pela Minha Cruz Gloriosa que Eu venho conceder o Meu Perdão universal a todo o pecador arrependido. Acaso escolhereis vós erguer a Minha Cruz? Eu espero. Porque, ainda um pouco, bem pouco de tempo, e O que há de vir virá, e não tardará.

O Meu justo viverá pela fé; mas se ele se apartar, não agradará à Minha alma” (Hb 10, 37-38).

A Cruz Gloriosa é a Medianeira do Perdão de Deus.

Amen. + JESUS da Cruz Gloriosa.

 

Fonte das mensagens acima: https://drive.google.com/file/d/1USYyi3--jL9eFNYTdTho04XW6DJn7_Wu/view

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